Fumigación de cucarachas
Las cucarachas suelen habitar
en zonas oscuras, húmedas y sucias, uno de sus lugares preferidos es la basura,
por eso es bastante común que transmitan enfermedades. Aparte de que son
insectos muy desagradables, es crucial tomar medidas lo antes posible para
evitar males mayores e impedir que invadan los espacios de nuestros hogares.
Uno de los primeros indicios que indican que hay cucarachas
en casa es la presencia de ellas, o de huevos debajo o detrás los muebles. El lugar mas común es cerca del cesto de basura y debajo del lavaplatos.
Una vez se han agotado las clásicas vías para matar
cucarachas con los típicos insecticidas de venta en los supermercados, va
siendo hora de tomar cartas en el asunto y ponerse serios. Hoy en día hay productos
muy eficaces y muy fáciles de manejar para las personas inexpertas y para casos
no demasiado graves de cucarachas en casa. A continuación, vamos a mostrarte
algunas técnicas para acabar con las cucarachas que no conllevan riesgos para
tu salud ni para las de tus mascotas, si es el caso.
Una de las maneras más comunes de eliminar estos insectos es
a través de algunas trampas. Son muy útiles y eficaces si la infestación es
pequeña, si todos los escondites están sellados, si tu casa está limpia y si colocas
suficientes en todas las zonas cercanas. Las trampas de cebo pegajosas deben
ponerse bajo los electrodomésticos, cerca de las paredes (y de los techos
falsos) y en otras zonas escondidas. Estas trampas habrá que moverlas y
reemplazarlas.
Otro mecanismo de control de cucarachas es la feromona que
segregan. Se ha conseguido sintetizar y muchos de los fumigadores profesionales
lo usan para atrapar a más cucarachas en las trampas. Se convierte en un imán
para muchas de ellas y las trampas resultan todavía más efectivas. La cuestión
en estos casos es atraer al máximo debido al poder de la feromona de agregación
y eliminarlas todas.
Otro de los métodos para acabar con las cucarachas es
aprovechar las temperaturas calientes o frías. Ambas pueden ser útiles para
matarlas, pero claro tendrás que ser capaz de mantener esa temperatura por un
periodo de tiempo. Si no las mantienes, las cucarachas tienen mecanismos
fisiológicos que las ayudan a adaptarse a cualquier estado. Así que si
encuentras cucarachas, prueba a congelarlas y en media hora estarán muertas con
un aparato de CO2. Aplica este frío en las hendiduras donde sabes que se
acumulan, y lo mismo con el calor, sube la temperatura durante unas horas lo
máximo posible, si no lo puedes soportar sal de casa y verás como a la vuelta
estarán todas muertas.
Otro de los métodos eficaces para fumigar cucarachas son los
desecantes. Lo que hacen es resecar cualquier cosa que entre en contacto con
ellas. Los insectos están recubiertos de una capa cerosa que evita la pérdida
de humedad y protege sus cuerpos, y los desecantes matan a las cucarachas
porque destruyen esa capa. Dos de los más eficaces son el gel de sílice y el
ácido bórico. El aerogel de sílice es una sustancia químicamente inerte y nada
abrasiva, se usa como un agente que deshidrata, ya que sus partículas absorben
los aceites y la humedad. Estas partículas tienen una carga estática que hacen
que se pegue al cuerpo de la cucaracha. Una vez adheridas, absorbe esa capa, la
deseca y la mata. Hay incluso productos que combinan en el aerogel de sílice
con insecticidas.
Y el último de los métodos es el ácido bórico, este deriva
del bórax y se combina con algún agente para que no se endurezca. Tras haber
paseado por alguna superficie con este ácido, las cucarachas mueren al
limpiarse ellas mismas. Se trata de un veneno estomacal que se absorbe
lentamente y que hace que el insecto se deshidrate. Hay que ser cuidadoso con
este método, especialmente si hay niños o mascotas en casa. Debe usarse en
lugares donde no se vaya a esparcir. Al no tener ningún ingrediente químico
activo, funciona de forma indefinida. Este ácido puede venir formulado en
líquido y en modo cebo.
Para usar desecantes como método de fumigación de
cucarachas, debes poner la sustancia en una botella flexible con boca pequeña y
aplicar una fina capa. Es mejor hacer varias aplicaciones pequeñas, que una
grande. Si lo colocas en zonas secas, absorberán la humedad del aire. Descubre
más detalles en el artículo Cómo usar el bórax para las cucarachas.
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